El exigente trazado de la antepenúltima jornada cronometrada de la Vuelta a Suiza permitió que Alejandro Valverde escalara dos puestos en la clasificación general individual, y ahora es cuarto, a tan solo 1:04 minutos de su compañero del Movistar, el portugués Rui Costa, líder ahora de la carrera transalpina en vísperas de dos jornadas de alta montaña que dictarán sentencia.
Fredik Kessiakoff (Astaná) evitó el triunfo ante sus paisanos de Fabian Cancellara (Radio Shack). El satisfactorio rendimiento de Alejandro Valverde se puso de manifiesto con el minuto y veintiún segundos que se dejó en los poco más de 34 kilómetros cronometrados. De entre los candidatos al triunfo final, el espigado escalador holandés jefe de filas de la Rabobank, Robert Gesink, fue el que mejor registro obtuvo, a 27 segundos de Kessiakoff. Frank Schleck cedió 1:37, y Kreuziger, 1:16, aunque no esos resultados no les apea en absoluto de la aspiración directa a estar en el podio final. Pero no son los únicos; las diferencias entre los diecisiete mejor clasificados no exceden los dos minutos. Dado que todavía restan tres altos montañosos Fuera de Categoría (HC), además de otras tres cimas de Segunda. Si a eso añadimos que son dos finales en alto, y que la etapa dominical supera los doscientos kilómetros, la lucha por el liderato está todavía muy abierta.
La ascensión al final de hoy sábado en Arosa (Fuera de Categoría) arranca en el alto Csstiel, de Segunda, lo que se traduce en casi 28 kilómetros de ascensión continua, porque cuando se corona Arosa, encontrarán un par de kilómetros de llano. Ese perfil de ascensión y final favorece a Alejandro Valverde, que hace gala de una efectiva punta de velocidad. Teniendo en cuenta que el Movistar está obligado a establecer un férreo control, y que Valverde estará capitaneando el mismo en los momentos finales decisivos, esa circunstancia le asegura estar muy presente y con opciones de triunfo.
El domingo, por la cima de los dos altos montañosos de Fuera de Categoría, Glaubenbielen y Glaubengerg, se pasa en los hitos kilométricos 138 y 176, lo que provocará una selección de cara a la ascensión final al Sörenberg, de segunda. Antes de estos tres se habrá ascendido el Peng, también de segunda, cuyo punto más alto coincide con el hito kilométrico 104. Otro final propicio para Valverde si no ha cuajado antes la tan esperada fuga. Desde lo más alto del Sörenberg hasta la meta distan algo menos de cuatro kilómetros de escasa pendiente ascendente. De no llegar fraccionado, Valverde puede sacar provecho de su rapidez.