La cuarteta ‘rojigualda’ era, aparentemente, superior a la danesa. Preocupaba el hecho de no haber superado el récord nacional en la primera manga, cuando se clasificó sexta, porque garantizaría el acceso a las medallas. Sin embargo, contra Colombia, por la mañana, se había logrado (3:59:520), y el optimismo de la expedición española de pista era óptimo como para afrontar por la tarde de ayer la lucha por el quinto puesto contra la Selección danesa.
España registró los mejores tiempos de referencia durante casi todo el desarrollo de la pruena de Persecucción. Pero llegados a la recta final de carrera, a la última vuelta, los daneses que llegaban con menos de un segundo de desventaja, aunque con cuatro integrantes, daba la vuelta al marcador y se imponía a los españoles.
En esa ronda, la cuarteta española rebajó el registro que databa del Mundial pasado, en abril, con 4:01:717. Aún así, comenzó más lento que en la anterior manga frente a Colombia, con 1:05:026 frente a 1:04:620, respectivamente. Pero a mitad de carrera había logrado los registros deseados, aunque por apenas cinco décimas: 2:02:269 a 2:02:754). En el tercer kilómetro, la diferencia era ya de un segundo. Y en el último, a diferencia de lo sucedido en la víspera, la cuarteta era más lenta.
«Su rendimiento había bajado mucho en la primera ronda, por ello hemos salido a por todo después de haber hecho el record en la ronda anterior, siguiendo con los mismos cuatro corredores. Por poco no nos ha salido”, decía el seleccionador español Martínez Oliver. Y es que España comenzaba incluso mejor que en la serie anterior (parciales de 1:04:448 y 2:02:147), aunque a partir del tercer kilómetro acusó el cansancio (3:01:186) mantuvo la ventaja sobre los daneses hasta la última vuelta, cuando fueron superados: 4:02:671 a 4:02:746.
“El objetivo que me marqué cuando entré como seleccionador era bajar de los cuatro minutos y hoy lo hemos conseguido, y además con las mejores marcas de siempre en los últimos compromisos como Mundial y Juegos –valoraba el técnico-. Y aunque el sexto puesto quizás sepa a poco, quiero decir que es importante. Primero porque no es fácil estar en los Juegos con el sistema de clasificación que hay. Y segundo porque el nivel ha subido muchísimo. Pero hemos trabajado bien y hemos logrado el objetivo”.
Igualmente Oliver tenía un recuerdo para “Bernal, que no ha podido estar aquí a su mejor nivel, y para Maeztu, que se quedó fuera por su apendicitis. Pero han sido un gran grupo de seis corredores, muy parejos, y el objetivo se habría podido conseguir con cualquiera de ellos”.
Por lo demás, el velódromo enmudeció con el fantástico record del mundo establecido por los británicos en la final, con 3-51-659. Y eso que emplearon en las tres series a los mismos hombres, pese a tener un recambio de lujo como Andrew Tennant: Ed Clancy, Geraint Thomas, Steven Burke y Peter Kennaugh. Australia y Nueva Zelanda, que superó a Rusia, completaron el podio.
La segunda final del día fue el keirin, en la que también hubo triunfo británico, con una Victoria Pendleton que estaba bastante tapada, pero que sacó a relucir su clase en una prueba en la que la australiana Anna Meares se precipitó en su ataque y quedó quinta. La plata fue para la china Shuang Guo y el bronce, para Waig Sze Lee, de Hong Kong.
Por último, referirnos al inicio de la persecución femenina, en la que Gran Bretaña conseguía un nuevo record del mundo, con 3-15-669, aventajando en casi cuatro segundos al trío de Estados Unidos, y un poco más a Australia y Canadá por lo que las locales ratifican su condición de grandes favoritas en esta prueba y cualquiera de estas tres selecciones puede ser su rival en la final. El torneo femenino continuará mañana sábado con la ronda de enfrentamientos y las finales.