Todavía con la duda sobre su posible participación en la clásica Gran Premio Camaiore, este próximo jueves, es segura su presencia en la Strade Bianche, el sábado, y en la Maxima Roma, el domingo, que ya disputó la temporada pasada. Después, Alejandro Valverde disputará, previsiblemente, la Milán-San Remo. Dejará Italia para afrontar dos grandes clásicas belgas, A Través de Flandes y Harelbeke. De regreso a España, y de acuerdo a su libro de ruta, al murciano de Las Lumbreras se le espera en la clásica Gran Premio Indurain como puesta a punto previo a la Vuelta al País Vasco y la Klasika Primavera de Amorebieta. En abril llega el turno del tridente de las históricas clásicas de Las Ardenas: Flecha, Lieja y Amstel. También existe otro interrogante sobre Critérium du Dauphiné y la Vuelta a Suiza. Una de las dos. El Campeonato de España será su antesala al Tour de France.