La Cancer Council Classic, en la ciudad australiana de Adelaida, es el epicentro del planeta ciclístico en este madrugador inicio de campaña. Ese es el ‘kilómetro cero’ para todo el pelotón ciclista internacional. El Tour Down Under, cuyo telón se alzará tan solo unos días después, es la primera prueba del circuito UCI WorldTour de recién estrenado 2012. Alejandro Valverde fue apartado de la competición cuando ejercía de líder de la clasificación que establece ese mismo circuito; algo así como la ‘Champion League’ para los novatos en la materia. Desde entonces ha transcurrido año y medio.
Envuelto en la incógnita que deja tras de sí ese largo periodo alejado de la competición puede que, cuando ustedes estén leyendo esta palabras, ya haya quedado parcialmente despejada. En la madrugada de la tarde-noche del sábado al domingo, el pelotón internacional participante disputa la Cancer Council Classic. La lógica invita a que cualquiera de los velocistas locales se imponga en un teórico final al esprint. Los australianos son preciados especialistas en el ciclismo en pista. La temporada de pista ya lleva transcurrido un buen puñado de tiempo, de modo que, los ciclistas locales ya llevan en sus piernas otro buen puñado de kilómetros curtidos tanto sobre el asfalto sobre la madera. Además está la significativa circunstancia climatológica; allí ahora gozan de unas temperaturas muy por encima de las nuestras invernales. Es por eso que, desde hace unos días, los ciclistas ya pedalean por las carreteras australianas para lograr un grado de aclimatación lo más alto posible.
En esos entrenamientos previos, Alejandro Valverde y sus compañeros del Movistar ya se han llegado incluso a probar a fondo, y los dirigentes de la escuadra navarra ya han manifestado su plena satisfacción tras haber visto cómo el de Las Lumbreras imponía un asfixiante ritmo de ascensión en los repechos insoportable para el resto. Todos sabíamos de su plena dedicación y esfuerzo en los entrenamientos en casa, pero cuando de medirse a los demás en plena competición se trata todavía está por ver. En este sentido, la cita australiana es demasiado pronto como para que le veamos brillar, pero quizás eso sí ocurra para abril. Los dirigentes del Movistar esperan que Valverde esté disputando a pleno rendimiento las grandes clásicas de las ‘Árdenas’ antes de tomarse un leve descanso antes de emprender su puesta a punto final para afrontar el asalto a la túnica amarilla del Tour de France.
En Adelaida también están prestos y dispuestos para emprender su peregrinaje al Tour de France el muleño Luís León Sánchez, enrolado en el Rabobank, y el ciezano José Joaquín Rojas. A éste último sí que podríamos verle muy de cerca en los finales al esprint ahora en el Tour Down Under. El final en alto que incluye la carrera australiana centra la atención de directores, ciclistas, aficionados y prensa en general. Esta etapa está llamada a ser decisiva de cara a la composición del podio final. Me van a permitir confesarles que no descarto ver en la disputa de la carrera a cualquiera de los tres ciclistas murcianos. A partir de ahí seguirán sus respectivos caminos, aunque con escenarios compartidos, como la Challengue-Volta a Mallorca, Paris-Nice y las grandes clásicas de las ‘Árdenas’. La cita cumbre será el Tour de France. Ya sabemos que Valverde luchará claramente por estar en cualquiera de los tres peldaños del podio de Los Campos Elíseos. Para Luís León Sánchez parece que priman los triunfos parciales, y si de paso se sitúa favorablemente en la general, se meterá también en la lucha final. Muy distinto será el objetivo de Rojas. Después de haber acabado segundo en la puja directa por el maillot verde de la Regularidad, esa batalla volverá a ser su desafío. De momento, nos quedamos con este excitante inicio de temporada.
