En el puesto 32 con 143 puntos. Ahí encontramos a Luis León Sánchez en la clasificación provisional del UCI World Tour. Puede que ceda algún puesto, ya que su actividad competitiva en 2012 acabó cuando cruzó bajo el arco de meta de la contra reloj por equipos del presente Campeonato del Mundo en Limburgo. El Rabobank logró el quinto puesto. «Para mi supuso un esfuerzo extra porque ya venía de pasarlo mal en las últimas clásicas canadienses en que tomé parte, pero el Rabobank competía en casa, y eso significaba mucho». El murciano de Mula es el que mejor palmarés de la escuadra holandesa cosechó esta presente temporada, de modo que, su participación era un compromiso ineludible.
El madrugador debú aconteció en el Tour Down Under (Australia), en enero. Al mes siguiente estuvo presente en tres frentes: Trofeo Mallorca, Vuelta Algarve y Clásica Almería. En la cita portuguesa hay quienes ya esperaban ver las primeras piruetas del murciano de la Rabobank en su modalidad predilecta, la cronometrada, sobre todo, cuando de tener a Alberto Contador en liza como rival se trataba. Pero Sánchez todavía estaba verde. Solo así podría dejarse ver en posteriores compromisos. En este sentido, las miradas se centrarían en la París-Niza, en la que el de Mula suma brillantes actuaciones. El 9 de marzo fue la fecha elegida para reencuentro con el éxito. y tras su paso por la Volta a Catalunya, llegó su eclosión en la Vuelta a Castilla y León, en la que se impuso magistralmente el 14 abril, además de vestir de líder. Pero el espectáculo de ‘Luisle’ continuaría de manera manifiesta con su festín de dos triunfos parciales en el Tour de Romandie, a finales de abril. Allí también ejerció de líder de la carrera.
El Campeonato de España contra reloj le aguardaba el 22 junio para que le viéramos vestido de ‘rojigualda’ por segunda edición consecutiva. Y llegados al Tour de France, donde pretendía alcanzar cumbre, acontecieron un serial de infortuníos a modo de caídas que dieron al traste con sus pretensiones de cara a la general individual. Aunque, eso sí, su anual encuentro con el éxito no le resultaría esquivo, y el 15 de julio, tras una magistral maniobra durante los últimos kilómetros, le llevó a coronarse en lo más alto del podio. Similar actuación repetía casi quince días después en la Clásica San Sebastián. Otra victoria más, aunque la última de la temporada. Ya estaba bien.
Demasiados días de exigente esfuerzo y resultados. Y aún así, tuvo ocasión de colgarse una medalla en la prueba de fondo en ruta de los JJOO de Londres. Cosa distinta aconteció en la de contra reloj, en la que le lastraron las averías mecánicas e infortunios.
Luis León Sánchez todavía estuvo presente en las clásicas Vattenfall Cyclassics, GP Plouay, GP Québec y GP Montreal, y en el Campeonato del Mundo de Contrarreloj por Equipos.
